El número simple 1 es el símbolo universal de la primera emanación del universo, del impulso creador.
Es el centro místico desde donde irradia el espíritu. El principio del que toda manifestación deriva y al que todo retorna agotada su existencia.

Los pitagóricos lo asociaban al átomo, generador de toda energía vital. Y dado que es el punto de partida del sistema numérico, para ellos era el primer principio abstracto, y sobre todo en los relatos folclóricos islámicos, se asocia esta cifra a Dios, el Único.

Cuando un héroe Sentra en la corte de cualquier infiel, suele declarar siempre en actitud de desafío » Mi saludo es para el que sabe que Dios es uno». En la religión védica hindú este número es uno de los nombre del disco creador Graham.
Al mismo tiempo es símbolo del hermafrodita, lo andrógino y bisexuado es autosuficiente y no necesita ser creado, pues existe por sí mismo. Y de hecho, tanto si se lo multiplica com si se le divide por si mismo, se queda siempre en 1, lo que no ocurre con ningún otro número excepto el 0, el cual no es objeto de estudio numerológico.

El 1 es asimismo, la personificación del ser humano evolucionado, caminando de pie, o el símbolo del órgano genital masculino.